El concepto de flexibilidad asociado a la forma de organizar las propias tareas durante la jornada o el que implicaba un matiz tecnológico, como el BYOD (Bring Your Own Device), da un giro con las nuevas políticas de horario flexible.
La escasez de talento, la alta competitividad que se vive en el entorno de mercado en cualquier industria y el valor que finalmente se ha reconocido a las personas, como parte esencial en el futuro de la compañía, hacen que los empresarios se replanteen cuestiones como las relacionadas con la conciliación de la vida familiar y laboral.
Un horario flexible no es sólo una forma de facilitar la consecución de ese necesario equilibrio entre la esfera personal y profesional que reclaman sus trabajadores, sino que implica también ampliar las oportunidades del negocio, que gana en aspectos como:
- Una mayor y mejor cobertura a sus clientes.
- Un equipo más satisfecho con sus responsabilidades, más comprometido con los objetivos de la empresa.
- Un activo de talento que no se pone límites, al no quedar restringido a un ámbito determinado.
Según datos de Glassdoor, Telefónica, Unilever o Vodafone ya tienen en marcha políticas de horario flexible. CaseNEX, LivingSocial, Ditto, Stack Exchange o UpWork son, tal y como explica The Muse, algunas de las compañías más flexibles del mundo, y no sólo en lo que respecta a las horas de entrada y salida a la oficina.
Y, en nuestro país, basta con echar un vistazo a las empresas reconocidas con el galardón Great Place to Work (la lista de 2018 está disponible aquí), de las cuales el 98% asegura el horario flexible. Como InboundCycle, en primera posición de la categoría PYMES dos años seguidos y que también cuenta con 5/5 puntos en Glassdoor.
Horario flexible: ventajas en cifras
Reducir el absentismo laboral, mejorar el ambiente de trabajo o atraer talento son algunos de los beneficios de decidirse a implementar políticas de horario flexible en la organización. Las empresas que permiten a sus empleados esta libertad disfrutan de importantes ventajas, como demuestran los siguientes datos:
- El 87 por ciento de los profesionales piensa que tener un trabajo flexible reduciría su estrés y el 97 por ciento dice que un trabajo con flexibilidad tendría un impacto positivo en su calidad de vida en general (FlexJobs)
- El 89 por ciento de las compañías observan una mejora en sus tasas de retención de talento simplemente ofreciendo opciones de trabajo flexibles (INC).
- Las personas que pueden elegir cuándo trabajan desde casa demuestran ser un 13,5% más productivas que los que no tienen esta opción (HBR)
Implementar opciones de trabajo flexibles no tiene efectos negativos en la productividad o calidad del trabajo; de hecho, en la mayoría de los casos, los negocios reportan niveles más altos de productividad, además de otros beneficios como costes operativos reducidos y prácticas comerciales más sostenibles.
Si estás pensando en dar un paso hacia la conciliación de la vida familiar y laboral de tus empleados no te olvides de tener en cuenta las mejores prácticas para empresas que deciden poner en marcha un programa de horario flexible, como las que podrás encontrar en esta guía de IESE y la Comunidad de Madrid.